“No tengo nada”, o “solo sentí como un latigazo pequeño”, son algunas de las cosas que comúnmente escuchamos en personas que acaban de tener un accidente de tránsito y se les pide que acudan a revisión médica. No obstante, no sentir dolor no quiere decir que hayan salido ilesos.
Además del evidente riesgo para la salud que pueden traer lesiones no atendidas, esto también podría significar perder información que le ayudaría a recuperar sus pérdidas en algún momento, como lo siguiente.
El registro de su accidente y lesiones resultantes
Si usted o un ser querido desean presentar un reclamo a su aseguradora o incluso una demanda civil (enlace en inglés) en contra de la parte culpable del accidente, lo indispensable son las pruebas. En el caso de una lesión, recibir atención médica oportuna podrá ayudarle a obtener:
- Una evaluación detallada sobre sus necesidades médicas y cómo resolverlas
- Evidencia de que su lesión está relacionada con el accidente que sufrió
- Comprobantes de seguimientos y tratamientos necesarios
- Costos exactos de la atención médica que necesitó
Adicional a esto, y para poder tener un caso fuerte, es necesario dar un seguimiento puntual y atender todas las indicaciones del personal médico, y que quede registro de esto. A pesar de ser claros los beneficios de por qué lo más conveniente es buscar la ayuda de un profesional de la salud, la realidad es que las facturas son costosas y las pérdidas muchas, lo cual nos lleva a la siguiente pregunta.
¿Cómo se paga un servicio médico si no hay suficiente dinero?
Existen varias opciones para cubrir estos costos. En este caso, nos referimos a un gravamen médico o “health lien”. En Washington, el personal médico, servicios de ambulancia, entre otros, deben ofrecer este gravamen (enlace en inglés) a quien sufra de lesiones traumáticas que deban ser cubiertas por quien haya causado un accidente. Sin embargo, tales servicios deben pagarse, y se esperará recuperar dicho dinero, por ejemplo, a través de una demanda civil contra el responsable.
A pesar de que una lesión después de un choque parezca ser simple o que se puede curar con unos cuantos analgésicos, la verdad es que puede provocar daños irreparables si no se atienden a tiempo. Es importante tener claridad sobre sus opciones, derechos y cómo afrontar las pérdidas y costos, de tal manera que pueda superar esta etapa sin perder su patrimonio. Contar con apoyo y asesoría de calidad para tomar decisiones pueden hacer la diferencia.