Los accidentes de tránsito son situaciones indeseables. Sufrir un choque trae consigo varias consecuencias para los involucrados. Entre ellas, pérdidas económicas y materiales, afectaciones a la salud momentáneas o permanentes, y daños a la propiedad, entre otros. Sin embargo, lo peor que puede ocurrir después de un percance vial es el fallecimiento de una persona. La pérdida de un ser querido es algo lamentable y doloroso.
En los accidentes de tránsito existen al menos seis lesiones que se consideran como padecimientos letales. Esto ocurre porque provocan la muerte de un alto porcentaje de automovilistas que han sufrido un accidente vial. Las lesiones letales se presentan de forma frecuente en los automovilistas que han chocado fuertemente durante sus trayectos.
¿Cuáles son las lesiones letales después de un accidente?
El estudio Causas de mortalidad en ocupantes de vehículos de motor: panorámica general (Causes of fatalities in motor vehicle occupants: an overview) revela cuáles son las cinco lesiones letales que sufren los automovilistas después de un choque fuerte (enlace en inglés). Se trata de un estudio forense en el que se desmenuzan las lesiones que pueden contribuir al fallecimiento de una persona accidentada.
Las lesiones más comunes son traumatismos por golpes severos. Empero, existen otros padecimientos que pueden llegar a provocarle la muerte a una persona. El estudio, publicado por la revista Forensic Science, Medicine and Pathology, detectó las siguientes lesiones:
- Traumatismos
- Lesiones penetrantes
- Incineración e inhalación de productos de combustión
- Ahogamiento
- Asfixia
Distintos tipos de traumatismos después de un accidente de tránsito son la causa más frecuente de fallecimientos en conductores. Un ejemplo de ello son los traumatismos craneoencefálicos. Ocurren cuando la víctima sufre un impacto en la cabeza. Como resultado del golpe se generan fracturas en el cráneo, hemorragias o contusiones.
En tanto, las lesiones penetrantes se refieren a cuando un objeto atraviesa a una persona y le causa daños severos. Pueden ser objetos dentro del vehículo o externos. En algunos casos, incluso la bolsa de aire puede provocar este tipo de lesión letal.
La incineración -menos frecuente que las anteriores- puede llegar a costarle la vida a una persona luego de un accidente de tránsito. Este tipo de lesiones dañan los tejidos blandos y órganos. Se producen después de la incineración de un vehículo.
Cuando una persona queda inconsciente después de chocar se puede producir un ahogamiento. Sucede cuando el accidente provoca el hundimiento del vehículo. Los conductores pueden quedar atorados en la cabina y ahogarse junto a sus vehículos.
El estudio explica que cuando un vehículo se vuelca se puede provocar la asfixia de los ocupantes. Esto ocurre cuando un automóvil se voltea, queda encima de los ocupantes y les comprime el cuerpo.
¿Qué se puede hacer?
Lo más importante es prevenir los accidentes de tránsito manejando con precaución, respetando señalamientos y límites de velocidad. Sin embargo, los accidentes de tránsito son situaciones inesperadas. Si usted ha sufrido un accidente de tránsito, lo más importante es su salud. Reciba atención médica inmediata.
Recuerde que si usted ha tenido lesiones como consecuencia de un choque puede solicitar una compensación. Es recomendable que acuda con un abogado con experiencia en lesiones personales y accidentes de tránsito para que usted reciba la atención adecuada y resuelva todas sus dudas.